POLÍTICA
La presidenta peruana, Dina Boluarte, anuncia la destitución del primer ministro una semana después de nombrarlo
La presidenta peruana, Dina Boluarte, aseguró este domingo que destituirá a su primer ministro, Pedro Angulo, al que nombró el pasado sábado, 10 de diciembre, en plena crisis nacional, tras el autogolpe de Estado del expresidente Pedro Castillo, y que todavía no había recibido el obligatorio voto de confianza del Congreso. La salida de Angulo de la jefatura del Ejecutivo forma parte de una remodelación del Gabinete que se hará efectiva este martes, el mismo día que el Parlamento debe volver a someter a votación el proyecto para adelantar los comicios de 2026 a 2023, que la semana pasada no logró los votos necesarios.
“Uno de los lugares que se va a cambiar es el premierato”, dijo Boluarte en una entrevista con la cadena local América Televisión, ofrecida un día después de confirmar que iba a hacer cambios en su Gabinete, pero sin mencionar de forma directa a ninguno de sus integrantes. Posteriormente, en una entrevista con Latina Televisión este domingo confirmó que los cambios en el Ejecutivo “no serán muchos” y aludió a algunos ministerios que cambiarán de titular. Entre ellos, se encuentran los ministros de Educación y de Cultura, puesto que ambos renunciaron en protesta por la represión de las violentas manifestaciones antigubernamentales en las que han fallecido 23 personas.
“Se necesita coraje y valentía para afrontar esa situación difícil”, subrayó la presidenta acerca de las personas que deben entrar a su gabinete. Tras conocerse la noticia, el aún primer ministro Angulo declaró a RPP que “la presidenta puede tomar las medidas que considere necesarias”.
“La presidenta es quien nos designa, quien nos extiende su confianza. Ella puede tomar las medidas que considere necesarias porque estará en conocimiento en que eso es útil. Nosotros estamos a disposición, sabemos que nuestros cargos, por su naturaleza, no son de permanencia. Los cargos están mientras se dan el respaldo de la mandataria”, expresó.
Las autoridades peruanas aseguraron el domingo en que las violentas protestas tras la destitución del presidente Pedro Castillo comienzan a ceder, mientras el Papa Francisco llamaba al diálogo y Estados Unidos a emprender reformas para salvaguardar la democracia.
La presidenta Boluarte aludió a las protestas en sus declaraciones a Latina, una televisión en la que afirmó que las autoridades peruanas no pueden ” darle tregua a la violencia, por eso han salido las Fuerzas Armadas y la Policía”. “No podemos vivir dentro del caos (…) con los violentos no se puede transar”, subrayó.
En todo caso, explicó que la Fiscalía tomará “cartas en el asunto” para investigar posibles abusos policiales y militares y garantizó que “se van a hacer las investigaciones necesarias”.
“Están funcionando las medidas que hemos tomado, es decir, se están recuperando carreteras, se están habilitando aeropuertos y también está disminuyendo la violencia de las personas que se manifestaban en la calle”, había declarado este domingo Angulo a la cadena de televisión estatal TV Perú.
Las protestas -más intensas en el sur andino, región golpeada por la pobreza, desigualdad y con demandas sociales postergadas- exigen la libertad del expresidente Castillo, que sigue encarcelado después de que un juez dictará contra él la medida de 18 meses de prisión preventiva por los cargos de rebelión y conspiración. Los manifestantes exigen también la renuncia de su sucesora, el cierre del Parlamento y elecciones generales inmediatas.
Boluarte ya adelantó que se mantendrá “firme” en el cargo y exigió al Congreso que acelere la aprobación de un adelanto de las elecciones generales, una demanda del 83% de los ciudadanos con la que podría atenuarse la crisis.
La presidenta también dijo que su gestión no va “a permitir que ningún gobierno extranjero tenga injerencia en el Estado peruano”, en referencia a la postura de los gobiernos de México, Colombia, Argentina y Bolivia, que apoyan a su predecesor, Pedro Castillo, destituido el pasado 7 de diciembre por el Congreso, tras intentar dar un golpe de Estado.
Boluarte dijo que la posición de su Gobierno se defenderá “a través de la cancillería” y elogió a la ministra de Relaciones Exteriores, Ana Gervasi, de quien alabó el estar “haciendo un trabajo idóneo” en las relaciones exteriores del país. “He visto su profesionalismo, quiero agradecer la firmeza de la canciller”, remarcó antes de confirmar su continuidad en el gabinete de ministros.